Tocaba preparar algo salado ya y tras leer hace unos días que La Cocina de Babel organizaba un concurso de Cocina Callejera y me he decidido a preparar algo que siguiera la línea de lo que pedía. No soy muy dada a los concursos, de hecho, creo que será uno de los pocos a los que Cook & se presente porque además del blog nos debemos a la revista y ésta lleva demasiado tiempo prepararla. Ahora mismo estamos enfrascadas en ella. Será que nos queda muy poco para publicarla y que ya estoy nerviosa pero los días se me hacen demasiado cortos. Os prometo que la semana que viene estará ya publicada, con muchas recetas, algún que otro lugar con encanto y más estival que nunca. Sé que no es una revista que os podáis llevar a la playa a no ser que sea con una tablet pero tengo en mente una manera de solucionarlo. A ver si saco tiempo y hacemos la versión óptima para la playa o la piscina.

Lo dicho, que Juana quería recetas callejeras y creo que ésta cumple con los requisitos. De mi viaje a Berlín de hace dos años tengo muy buenos recuerdos: los mercadillos navideños (fue durante el puente de la Constitución), el vino caliente especiado o Glühwein, el frío cortando la piel y el Rösti o Reibekuchen o Kartoffelpuffer. Son unas tortillas doradas de patata y cebolla ralladas que las servían en los mercadillos y que podías acompañar con tzatziki o puré de manzana. Fue amor a primera vista. De tal manera que hoy me he puesto a prepararlas y si no fuera por el calor, me hubiera visto de nuevo recorriendo el paseo que lleva hasta la Puerta de Brandeburgo, admirando el Museo de Pérgamo o impactada por el Jardín del Exilio.

La receta no puede ser más sencilla pero quería probar con otras verduras así que he optado por añadirle berenjena y calabacín. El resultado salta a la vista así que os invito a que preparéis este Rösti o Reibekuchen a mi manera y que participéis en el concurso que ha preparado La Cocina de Babel.

Ingredientes (para 8 tortitas)

3 patatas medianas

1 berenjena

1 calabacín

1/2 cebolla

1 huevo

1 cucharada de harina de maíz

Aceite

Sal y pimienta

Preparación

Pelamos las patatas y lavamos toda la verdura.

Rallamos todas las verduras con un rallador grueso.

Con nuestras manos prensamos muy bien la verdura rallada para que elimine todo el agua. Este paso es fundamental para que no salten al freír.

Salpimentamos al gusto.

Añadimos la cucharada de harina de maíz y el huevo.

Mezclamos bien. No queremos hacer una tortilla de patatas. Sólo queremos que la verdura rallada no se desmenuce en la sartén así que con un huevo y la cucharada de harina tendréis suficiente.

En una sartén colocamos aceite. No es necesario que sea en exceso. Basta con ocupe tan sólo 2 centímetros de alto. No queremos sumergir las tortitas en és, tan sólo que no se peguen a la sartén. Colocamos una cucharada bien repleta de la masa en la sartén y aplastamos ligeramente.

Cuando estén doradas por ambos lados, dejamos reposar sobre un papel de cocina para eliminar el exceso de aceite.

Servimos con salsa de yogur, pepino y ajo o con la salsa que más os guste aunque están perfectas sin nada.

¡Disfrutad!