Con las maletas casi por deshacer y con muchas ideas por llevar a cabo, regresamos con nueva receta. Una de ésas que tanto me gustan a mí por su simplicidad de ingredientes. ¿Cómo algo que contiene tan pocos productos tiene tanto sabor?
Confieso que suelo cocinar sobre la marcha. No soy fiel a las recetas al pie de la letra y continuamente cambio de idea a medida que estoy cocinando. No soy de manuales y es lo que me pasó con esta receta. Suelo preparar la fideuá con marisco y trocitos de rape por lo que en un primer momento no pensé en preparar este plato. Me decanté por hacer unos espaguetis con gambas hasta que al tener el fondo preparado pensé que valía la pena aprovechar bien las gambas y usar su esencia para que la pasta se cociera en ellas por lo que opté por preparar estos fideos. No perdí más tiempo y me ahorré fregar una cacerola por lo que un plato de domingo, de los que dejamos para el fin de semana para dedicarle más tiempo se convirtió en mi opción entre semana y sin perder esos minutos que no tenemos.
Y ya puestos, ¿qué mejor que un alioli con huevo y casero en 1 minuto? No hay palabras para explicar la cara de sorpresa de los míos al llegar a casa y ver la comida en un día cualquiera.
Ya os he comentado que no soy de estereotipos, no soy de las paellas los domingos, ni del turrón sólo en Navidad, ni del chocolate con churros solo en los días de invierno con un frío que cala en los huesos. Huyo de todo eso porque los placeres hay que disfrutarlos cuando lo pide el cuerpo y si se quiere se puede. Basta ponerle dedicación y administrarnos el tiempo. Os lo digo con convicción, segura de lo que digo. Aprovechad cada minuto, haced que la rutina no se adueñe de vuestra vida.

Mientras tanto os dejamos la receta de estos fideos a banda.
Ingredientes (4 personas)
Para los fideos
10 gambones
1 litro y medio de agua
1 cebolla
150 ml vino blanco
3 tomates rallados
1 manojo de perejil
2 ajos
5 hebras de azafrán
200 gr de fideos de nº 3
Sal
Pimienta
100 ml de aceite de oliva virgen extra
Para el alioli
1 huevo
100 ml aceite de oliva suave
Sal
Pimienta
1 ajo
Preparación
Pelamos las gambas y reservamos las pieles y las cabezas para realizar el fumet.
Eliminamos las tripas para que no amarguen.
En un cazo colocamos una cucharada de aceite de oliva y rehogamos las cabezas y las pieles.
Añadimos 100 ml de vino blanco y dejamos reducir. Machacamos con una cuchara de madera las cabezas para extraer toda la esencia. Cuando el alcohol se haya reducido, añadimos el litro y medio de agua y dejamos cocer durante 30 minutos.
Pasado ese tiempo, colamos bien el fumet y reservamos.
En una paellera, añadimos el aceite de oliva virgen y pocha nos una cebolla que habremos picado finamente.
Cuando esté transparente añadimos el resto del vino blanco y dejamos que reduzca en alcohol.
Incorporamos los tomates rallados y sofreímos.
Llega el momento de añadir los fideos y rehogarlos para que se tuesten.
Machacamos el perejil y los ajos.
Regamos los fideos con el fumet, añadimos sal y pimienta al gusto, el picadillo de perejil y dejamos cocer.
Los primeros 10 minutos a fuego fuerte, introducimos las gambas y bajamos el fuego a nivel medio hasta que los fideos hayan absorbido todo el fumet.
Tapamos con un trapo la paellera y dejamos reposar 5 minutos.
Mientras tanto preparamos el alioli.
En el vaso de la batidora colocamos el huevo, añadimos sal al gusto, un ajo y el aceite de oliva.
Introducimos la batidora en el fondo y comenzamos a batir sin moverla.
Veremos como se va montando poco a poco. A medida que tengamos la crema montada vamos levantando  la batidora para que todo el aceite se integre bien.

Servimos los fideos a banda con una cucharada de alioli.

PD: Estamos preparando el próximo número de la revista que saldrá justo antes de navidad .En breve os pondremos el enlace y la gran tarea de un nuevo miembro en nuestra revista que se incorpora a la parte de diseño. Sólo os anuncio que váis a quedar maravillados. Tanto como yo.